Alarma en Múnich por amenaza de bomba en el Oktoberfest

En Múnich, el Oktoberfest, el festival de cerveza más grande del mundo, tuvo que pausar sus actividades el miércoles pasado debido a una amenaza de bomba. Esto ocurrió después de que una casa al norte de la ciudad explotara, resultando en la muerte de una persona y con dos heridos graves, lo que intensificó las medidas de seguridad.

La policía, junto con unidades especiales y perros rastreadores, inspeccionó minuciosamente el predio del festival en busca de otros explosivos. El alcalde de Múnich, Dieter Reiter, expresó que la seguridad es prioridad y que el evento no se reanudará hasta garantizarla completamente.

El incidente, que posiblemente se originó por una disputa familiar, se complicó con el descubrimiento de trampas explosivas en la zona afectada. Un centenar de fuerzas de seguridad estuvo presente para controlar la situación, y se investiga si el fallecido era el responsable de la explosión.

A pesar del impacto económico y organizativo, la clausura temporal del Oktoberfest ha sido considerada esencial por las autoridades para evitar tragedias mayores. La memoria de episodios violentos pasados, como un atentado en 1980, sigue presente en la comunidad, reforzando el enfoque cauteloso en este tipo de eventos masivos.